Esperan que el gesto de unidad en Capital Federal y Buenos Aires produzca el "efecto cascada" sobre las otras provincias y confían en que todas las cartas todavía no fueron echadas. A dos semanas del acuerdo entre la UCR y el Frepaso, los dirigentes de la Alianza trabajan contra reloj en el mapa electoral con el que debutarán en las elecciones de octubre.
El 26 de agosto vence el plazo para la presentación de listas. Ese día, los aliados sabrán dos cuestiones esenciales para el futuro de la coalición:
Hasta qué punto el entusiasmo inicial logró repercutir en el interior
Y con qué fuerzas contarán para el momento de enfrentarse al oficialismo.
El acuerdo sellado el 2 de agosto, entre Raúl Alfonsín, Chacho Alvarez, Rodolfo Terragno, Fernando de la Rúa y Graciela Fernández Meijide, sólo incluyó a Capital Federal y Buenos Aires como los distritos pactados para la Alianza -juntas abarcan casi la mitad de los votantes del país-. Y dejó al resto de las provincias en en "libertad de acción".
En sus cálculos, considerán distritos claves para torcer la elección a Mendoza, Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe y Tucumán: suman el 75 por ciento del padrón electoral, con Buenos Aires y Capital.
Cuando la UCR es oficialismo
En ese mapa de intentos aliancistas, Córdoba es la provincia a que tanto radicales como frentistas dan por perdida.
La negativa del gobernador radical Ramón Mestre, quien sostiene que no necesita aliados para ganar, y el posicionamiento del Frepaso como oposición provincial, obligarán a marchar con listas separadas: la UCR con Mario Negri y el Frepaso con Humberto Volando.
Ejemplo de lo que sucede en cuatro de las cinco provincias gobernadas por el radicalismo, Córdoba es además la muestra del límite que los negociadores nacionales están dispuestos a tolerar en los desacuerdos provinciales.
Sin alianza en octubre, la presión sobre los dirigentes cordobeces reinició el diálogo. En las nuevas conversaciones barajaran la posibilidad de acordar para el 99.
El cuadro de situación se repite.
En Chubut, Río Negro y Catamarca, la UCR en el oficialismo, y el Frepaso como oposición, no aceptarán listas únicas.
Con La Rioja y La Pampa (gobernadas por el PJ) y Neuquén (donde manda el MPN), son las seis provincias que no estarán en el organigrama de la Alianza.
A cambio, las que sí decidieron presentar listas conjuntas son: San Luis, Corrientes, Tierra del Fuego, Chaco y Salta. Los salteños no lograron sumar a todos los sectores del Frepaso y varios de ellos irán con su propio lema, pero sumarán al Partido Renovador.
En cuestiones de Alianza, Chaco lleva varios años de ventaja. El radical Angel Rozas llegó a la gobernación en 1995, gracias coalición que sellaron la UCR y el Frepaso. En la edición 1997, previa al acuerdo de los dirigentes nacionales, se sumarán dos partidos proviciales y el autonomismo.
El mapa continúa con las provincias en las que tanto radicales como frepasistas aseguran que, con más o menos conflicto, la Alianza llegará.
En Santa Fe, el tercer distrito en importancia y que podría asegurarles una balanza a favor en el resultado general, la coalición que la UCR, el Partido Demócrata y el Frepaso sellaron en 1995 -cada uno fue con su propio sublema y no lograron derrotar al justicialismo-, podría reflotarse en estas elecciones.
En el preacuerdo para volver a la Alianza Santafesina, las tres fuerzas coinciden en que la lista deberá estar encabezada por la UCR. La incógnita que permanece es si será Horacio Usandizaga quien ocupe ese lugar. El senador radical adelantó que no quiere abandonar su banca y reclama que sea el candidato electo, René Balestra, quien vaya primero. Para secundar al postulante de la UCR, el PDP llevará a Alberto Natale -quien aspira a encabezar la lista si no logran convencer a Usandizaga-, y el Frepaso a Antonio Bonfatti.
Los mendocinos, por su parte, avanzaron en "propuestas programáticas y legislativas" conjuntas. El Frepaso está dispuesto a que el radical Víctor Fayad encabece la lista. Pero no quieren que su candidata, Cristina Zuccardi, descienda al tercer lugar dejando el segundo a Raúl Baglini, también de la UCR. El panorama se complica con la oferta de candidatos. Por las cinco bancas en juego pelean también el PJ, PAIS, y el Partido Demócrata.
INFORMES: CORRESPONSALES DE CLARIN
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